miércoles, 14 de abril de 2010

Perseverar

Muchas veces iniciamos un proyecto con toda la motivación y el entusiasmo en nuestro ser, pero en el camino van surgiendo esos infaltables obstáculos y vienen los primeros tropiezos... unos son pequeños, otros muy grandes... y poco a poco, empiezan a debilitar ese impulso inicial con el que comenzamos.
Algunos al poco tiempo han abandonado; otros resisten algo más, pero al final también abandonan y se convencen que eso que perseguían era "imposible" de alcanzar y nunca más lo intentan; y quizás, ambos grupos de desertores buscan en otra cosa "más a su alcance" consuelo a sus ambiciones fallidas.
Sólo unos poquísimos logran mantener ese fuego interior a pesar de que la vida los golpea una y otra vez, hasta que cierto día eso por lo que tanto lucharon está a su alcance y es suyo.
A continuación un extracto del libro La Culpa es de la Vaca de Jaime Lopera Gutiérrez y Marta Bernal Trujillo:
"La historia dice que este hombre fracasó en los negocios y cayó en bancarrota en 1831.
Fue derrotado para la Legislatura de 1832.
Su prometida murió en 1835.
Sufrió un colapso nervioso en 1836.
Fue vencido en las elecciones de 1836 y en las parlamentarias de 1843, 1846, 1848 y 1855.
No tuvo éxito en su aspiración a la vicepresidencia en 1856, y en 1858 fue derrotado en las elecciones para el Senado.
El hombre obstinado fue Abraham Lincoln, elegido presidente de Estados Unidos en 1860.

La lección es muy sencilla:
sólo se fracasa cuando se deja de intentar."

1 comentario:

  1. Wow, mira tu yo no sabía eso. Eso nos enseña que el que la sigue realmente la consigue :D
    saluditos
    dtb

    ResponderEliminar